La pieza central de Alexander está inclinada 45° para seguir la dirección de la lengua. Combinado con el dulce sabor del acero dulce, incluso los caballos más exigentes y sensibles disfrutarán de esta embocadura.
La pieza central funciona bien en caballos que presionan la lengua contra la embocadura en un intento de evitar el contacto y tomar el control.
Al tensar las riendas, Alexander proporciona una presión tanto en las barras como en la lengua que anima al caballo a soltarse a la vez que proporciona una sensación más ligera en la mano.
Una buena elección para caballos que necesitan trabajar en desarrollar un contacto más continuo.
El Goyoaga puede describirse como un filete de anilla fija con diferentes niveles graduales de acción con palanca. Dependiendo de dónde se ajusten las riendas, se puede escoger una mayor o menor tensión o palanca, colocando la rienda más abajo para obtener más palanca y más arriba para obtener menos/ninguna palanca.
La sensación de estabilidad que proporciona el Goyoaga puede ser buena para caballos con poca estabilidad y ansiosos que se vuelven fuertes, con falta de equilibrio y difíciles de girar.
El Goyoaga ejerce presión más abajo en la boca y la distribuye hacia la barbilla y la nuca, lo que puede ayudar a un caballo que tiende a llevar la nuca demasiado alta.
Debe utilizarse siempre con una cadenilla u otra barbada.
